Recaredo cierra el ciclo de cenas ‘Recuperem La Il·lusió’
Recaredo y Celler Credo ponen punto y final al ciclo de cenas al aire libre ‘Recuperem La Il·lusió’, una iniciativa en formato ‘pop up’ que ha contado con una gran acogida por parte del público. Durante los meses de verano, el patio de Recaredo se ha convertido en la sede efímera de más de 30 restaurantes del territorio, encargados de diseñar una propuesta gastronómica única para cada velada, acompañada de los vinos de Recaredo y Celler Credo.
El ciclo, celebrado en las instalaciones de Recaredo en el centro de Sant Sadurní d’Anoia, surgió con la voluntad de reactivar la actividad de los restaurantes, afectados por la pandemia de la COVID-19. Para muchos, la iniciativa ha servido para dar la bienvenida a una nueva temporada de cocina en un ambiento íntimo y con la presencia de su clientela habitual tras unos meses paralizados.
“La situación sanitaria nos puso en relieve la necesidad de cooperar, de estar al lado unos de los otros, de ayudarnos mútuamente”, explica Ferran Junoy, director de Recaredo. “La suma de esfuerzos ha sido muy positiva para todos: hemos conseguido crear mucha sinergia entre todos los equipos. Desde Recaredo ha sido muy especial reencontrarnos cada noche con todos nuestros amigos y amigas del sector de la restauración”, añade.
Más de 30 propuestas gastronómicas únicas
El encargado de debutar en las cenas al aire libre el pasado mes de junio fue Cal Pere del Maset, restaurante de Sant Pau d’Ordal que también ha sido el responsable de cerrar el ciclo este mes de septiembre. A lo largo de estos meses, el patio de Recaredo también ha acogido a los restaurantes Alkimia, L’Àpat, Bar del Mercat de Vilanova, Bodega Sepúlveda, Cal Blay, Ka l’Arnau, Restaurant Clàudia, Cal Cuiner, Cal Ton, Cal Xim, Casa Joan, Cigró d’Or, Dos Pebrots, Fonda Neus, Granja Elena, Infinit Restaurant, Llesqueria 1900, Monocrom, Il Picarolo, Plata Bistró, Tastet, Velòdrom Miquel Sòria y Vilagut Restaurant.
Las cenas se han celebrado bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria teniendo en cuenta las indicaciones marcadas por la Generalitat de Catalunya. Las jornadas se han limitado a un máximo de 30 personas y las comidas se han llevado a cabo en un espacio de 400 metros al aire libre, asegurando la distancia de seguridad entre todos los asistentes.