Cuaderno de vendimia Recaredo 2021
Martes 17 de agosto. El campanario de Sant Sadurní marca el compás de un nuevo día. Son las 5 de la madrugada. Nos colocamos el chaleco reflectante, el frontal y preparamos los guantes de seguridad. En la puerta de la bodega, nos reunimos una cuadrilla de 38 personas para dirigirnos al viñedo. Empieza la vendimia en Recaredo.
Sentimos expectación, pero también nervios. Hemos preparado minuciosamente la bodega y la logística para recolectar a mano la totalidad de nuestras viñas bajo los criterios más exigentes. Vendimiar a mano es laborioso, pero vale la pena invertir tiempo en ello: resulta más sostenible que la vendimia mecánica y, además, permite una selección cuidadosa del fruto.
El silencio de la noche pronto se rompe con el clic-clic de las tijeras y de las cajas que apilamos con cuidado en el remolque. Los racimos entrarán bien frescos a las prensas y, con una suave presión, obtendremos un mosto equilibrado y con carácter, la antesala para elaborar nuestros Brut Nature de larga crianza.
Las primeras bayas de xarel·lo y macabeo corroboran nuestras intuiciones: estamos ante una de las mejores añadas de los últimos tiempos con una uva plenamente sana, una acidez cítrica extraordinaria y una riqueza de aromas y matices que despiertan nuestro optimismo. Podría haber sido la añada soñada… si no fuera por la falta de lluvias y, en consecuencia, los bajísimos rendimientos.
En Recaredo practicamos una viticultura de secano, respetuosa con los escasos recursos hídricos en la cuenca del Mediterráneo. Ha sido un año en el que la naturaleza se ha mostrado poco generosa en lluvias, especialmente durante la primavera. Este hecho se ha traducido en unos rendimientos que suponen un 35% menos respecto a nuestra previsión, con una media de 4.693 kg de uva por hectárea (el máximo permitido por la normativa Corpinnat es de 12.000 kg/ha).
Afortunadamente, la sabiduría de la experiencia se evidencia en el arraigo profundo de las cepas viejas de Reserva Particular y de Turó d’en Mota, que sobreviven, se adaptan y mantienen la regularidad de los rendimientos, ofreciendo lo mejor de ellas mismas.
La memoria todavía viva de las añadas especial- mente secas de 2015 y 2016 sobrevuela nuestros pensamientos y reafirma la apuesta por la plantación de viñas de xarel·lo en zonas de montaña, buscando más altitud, más precipita- ciones y un acentuado contraste térmico entre la noche y el día. Asimismo, nos mantenemos firmes en la decisión de cultivar variedades que histórica- mente han definido el territorio del Penedès, con ciclos vegetativos largos y una extraordinaria capacidad de adaptación al clima mediterráneo.
Proyectos de eco innovación
El equipo de viña de Recaredo ponemos en marcha proyectos de eco innovación centrados en el cambio climático, como la aplicación del sombreado en determinadas viñas en función de la exposición solar, la recolección nocturna o la apuesta por sistemas de plantación en vaso, que permiten una aeración natural de la uva y una mejor protección contra la incidencia del sol.
¿Cómo ha sido la campaña 2020/2021?