Vendimia 2020 en Recaredo: año de retos
Año récord de lluvias. La comarca del Penedès registra una pluviometría superior a los 800 l/m2 durante la campaña vitivinícola 2019/20, muy por encima de la media que se sitúa sobre los 520 l/m2.
La abundante lluvia invernal supone una buena carga de reservas hídricas para las cepas, aunque las tormentas continuas hasta principios de verano dibujan un panorama marcado por la incidencia implacable del hongo del mildiu… Una situación nunca vista hasta ahora en el Penedès y que nos recuerda que la naturaleza viva, palpitante y auténtica siempre ofrece lecciones por aprender.
El esfuerzo de un equipo. No hemos dejado de trabajar los viñedos ni un solo día: primero, realizando las podas de invierno y la poda en verde en primavera; después, gestionando las cubiertas vegetales y llevando a cabo tratamientos ecológicos y biodinámicos. Las cepas no entienden de confinamientos y el equipo de viticultura – junto con los compañeros de bodega y de cavas, que vieron más afectada su actividad – han trabajado intensamente para mantener las fincas en pleno equilibrio.
Alianzas. Fieles a un compromiso por elaborar vinos respetuosos con el ecosistema, continuamos desarrollando acciones de preservación de murciélagos en el viñedo como insectívoros naturales, así como estudios poblacionales de mariposas para determinar el impacto que tiene el cambio climático sobre determinadas especies. Estos programas de biodiversidad se enmarcan en una colaboración con el Museu de Ciències Naturals de Granollers, un proyecto conjunto que se inicia en 2013 fruto de la inquietud de Recaredo por mantener y mejorar la calidad de los entornos naturales.
Vendimia nocturna. Hemos realizado parte de la recolección durante la noche con la finalidad de vendimiar la uva en condiciones térmicas idóneas, obtener una mejor expresividad del mosto y reducir la exposición de los profesionales a las altas temperaturas.
Gran xarel·lo. La xarel·lo, que representa el 60% de nuestra plantación, muestra una mayor resistencia ante el ataque del mildiu en comparación con variedades como la macabeo o la garnacha tinta, que han visto menguada notablemente su producción.
El exigente trabajo en los viñedos ha resultado esencial en una añada que no podemos negar que ha sido tan dura por la presión del mildiu como satisfactoria… Porque no hay nada más gratificante que la superación de un reto y el aprendizaje continuo.
